Historias de sexo de gente poco común II

Buenas y santas damas y caballeros, en el día de hoy me acerco nuevamente al teclado para tipear una historia no muy reciente sobre uno de los pacientes que tuve. Este paciente es claramente representativo de un grupo grande de personas que se encuentran en la misma situación que él, por eso voy a comentarles este caso para que de ahí en más generalicen y no me rompan las pelotas a mí, que tul?

Caso N° 2: Manuel Ero

Manuel Ero vino a mí en busca de ayuda en un estado de desesperación total. No solo padecía de una enfermedad muy rara conocida como “Alzaje Total” (“Always al Palo” en inglés) sino que además tenía la desgracia de vivir al lado del mejor bulo de Buenos Aires (“Tangas Lujuriosas”) y su balcón daba justo a las clases de aeróbicos del Megatlón que tenía enfrente. Esto es tan grave como decir que una persona alérgica a la miel se case con la hija de Winnie Pooh:

Hija de Pooh: Pa, te presento a Lucas, mi novio…
Winnie Pooh: Cómo estas Lucas? Sentate, vamos a comer.
Lucas: Uhhh buenísimo, que hay para comer?
Winnie Pooh: Eh… Miel, obvio, que otra cosa vamos a comer?
Lucas: No, pero eh… pasa que… soy alérgico a la miel… =$
Winnie Pooh: QUE????? NENA!!!!! POR QUÉ NUNCA ME CONTASTE ESTO? (mientras agarra un cucharón lleno de miel) YO LE VOY A MOSTRAR A ESTE PAPANATAS LO QUE ES BUENO!
Lucas: NOOO!!!!! AHHHHHHH!!!!!!!!!!!!!!!!!! (Yéndose para atrás sin darse cuenta de que se está encerrando solo contra la pared).
Winnie Pooh: TOMA! (y le mete la cuchara en la boca a la fuerza).
Lucas: (Tragando con esfuerzo) NOOO!!!! WAAAAAAAA!!!!! AHHHH!!!!!
Winnie Pooh: … bueno… y? Que onda? No te morís o algo parecido?
Lucas: No, la verdad que no, pero mañana me van a salir unos granos ho-rri-bles que son re molestos viste?

Bueno, volviendo a Manuel Ero, resulta que el loco vivía en constante alzaje, el problema que esto generaba es que la sangre no le daba para estar todo el tiempo allá abajo en vez de estar oxigenando el cerebro, entonces como que de repente se desmayaba o tenía algún tipo de viaje lsdiano. Él ya estaba cansado, cuando vino a mí no sabía más qué hacer. “No quiero quemar mas cartuchos al pedo doctor” recuerdo que me decía. Haciendo uso de todos mis dotes de sexólogo extremo, pensé una solución... y qué pedazo de solución!
Manuel Ero pasó dos años donando semen todos los días, mínimo 6 o 7 veces por día, una vez cultivado un brazo de popeye más o menos, empezó a entrar en concursos under de pulseadas en bares de camioneros de mala muerte (obviamente nunca dejando de “entrenar”) hasta sacarle la guita a todos, y así siguió escalando hasta que le ofrecieron hacer una peli de su vida, entonces se cambió el nombre por Silvester Stallone, filmó “Over the Top” (la peli en la que el loco se pone la gorra para atrás y se pone como loco, eso, solo nosotros sabemos, es porque así podía estar más cerca de la ventana del Tangas Lujuriosas) y terminó viviendo como un bacán.